domingo, 9 de mayo de 2010

TRAGEDIA: NASHVILLE INUNDADO

EL CUMBERLAND SE PUSO FURIOSO: TORRENCIALES AGUACEROS ESTE 2 Y 3 DE MAYO INUNDARON TOTALMENTE A LO LARGO Y ANCHO LA CIUDAD DE NASHVILLE, TENNESSE.

RECORDEMOS QUE ESTA COSMOPOLITA Y ANTIGUA CIUDAD EN “EL CINTURÓN DE LA BIBLIA”, HA SIDO UN BASTIÓN DE LA FE CRISTIANA BAUTISTA POR SIGLOS.

EL GRAND OLE OPRY, EL LP FIELD (TITAN'S STADIUM), EL COUNTRY MUSIC HALL OF FAME, EL SCHERMERHORN SYMPHONY CENTER, Y EL GAYLORD OPRY LAND HOTEL TUVIERON GRAVES PERDIDA. SUMANDO LOS MILLONES DE PERSONAS AFECTADAS, SUS CASA PERDIDAS TOTAL, AUTOS, NEGOCIOS, ETC, LAS AFECTACIONES CUANTIFICADAS EN DOLARES SON ASTRONÓMICAS.

RECORDEMOS QUE NUESTRA IGLESIA HA RECIBIDO GRAN BENDICIÓN SIN LIMITES, TRANSMISIÓN DE CONOCIMIENTO PROFUNDO DE DIOS A TRAVÉS DE LOS HERMANOS DE NASHVILLE Y HERMANOS NUESTROS QUE FUERON ENVIADOS A SER CAPACITADOS PARA SERVIR, TAMBIÉN HAN SIDO DE BENDICIÓN A TODO EL PAÍS.

ORE POR NASHVILLE: OREMOS POR LAS FAMILIAS TENNESSIANAS, OREMOS POR FORTALEZA PARA LOS HERMANOS BAUTISTAS DEL SUR, Y OREMOS ESPECIALMENTE POR MIS HERMANOS Y EL MINISTERIO DE LIFEWAY CHRISTIAN RESOURCES... DIOS EN SU INFINITO PODER Y MISERICORDIA, HARÁ.

viernes, 2 de abril de 2010

AYUNA POR LA PAZ

RED DE AYUNO POR LA PAZ ¡ALTO A LA VIOLENCIA EN PANAMÁ! Durante los días santos, acompañame a AYUNAR para que DIOS ponga un ALTO A LA VIOLENCIA en Panamá. Puedes acompañarnos ayunando (solo líquidos) en tiempo parcial o completo, según lo disponga tu corazón. Corre la voz con tus amigos o a través de FACEBOOK. JUNTOS PODEMOS!! Dios bendiga a Panamá…

COMO PUEDO LOGRAR EL PERDÓN DE DIOS?

Esta es una pregunta que muchos ven de difícil respuesta. No obstante, hace dos mil años Jesús el Maestro nos explico en la parábola del fariseo y el publicano en Lucas 18:9-14, que se trata de la prevalencia de la humildad frente a la soberbia. Es la importancia del arrepentimiento sincero en contraste con aquel que siempre piensa bien de sí mismo y en una permanente actitud de autojustificación, no espera ser justificado por el único que puede hacerlo: DIOS.

Nosotros hombres falibles, no nos decantamos por mostrar las ricas facetas de la vida de Jesús de Nazareth. Jesús era un educador por excelencia. Siempre buscaba los relatos que expresaban la vivencia de su pueblo para enriquecer un dialogo constructivo con la gente sencilla y humilde. Por eso les hablaba en parábolas.

“A unos que confiaban en sí mismos como justos y menospreciaban a los otros, dijo también esta parábola: «Dos hombres subieron al templo a orar: uno era fariseo y el otro publicano” (v.9-10).

Acerca de la oración, podemos decir que al igual que las antiguas costumbres de oriente medio, la oración pública en el Templo se hacía de mañana y en la tarde a horas determinadas, en cambio la oración privada, al igual que ahora, se hacía a cualquier hora.

Obviamente estamos ante una oración pública, pero, definamos los personajes. El publicano en la sociedad del tiempo Jesús era un individuo despreciado, era el recaudador de impuestos para el Imperio Romano, en pocas palabras, un odiado y estigmatizado traidor.

El fariseo era un individuo religioso, devoto, fiel cumplidor de las obligaciones religiosas y normalmente juzgador de quién no las cumple.

“El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: "Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres: ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; ayuno dos veces a la semana, diezmo de todo lo que gano” (vs. 11-12).

Solo la descripción de todo lo que hacía en términos de su fe religiosa, es señal de autojustificación. En su subconsciente era tan buena persona que no necesitaba del perdón de Dios.

“Pero el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: "Dios, sé propicio a mí pecador” (v. 13).

Hoy gracias al sacrificio de Jesús no necesitas hacer penitencia, ni pagar manda para ser perdonado o que Dios te conceda algo. Golpearse el pecho era un símbolo de contrición, el publicano estigmatizado no necesito de mucho palabrerío para que Dios escuchara su oración.

A simple vista ambos se veían iguales en su devoción y búsqueda de Dios, pero Dios ve más allá y discierne hechos, palabras, y las intenciones del corazón.

La actitud del publicano al reconocer “yo soy un pecador”, es la forma cómo podemos lograr el perdón de Dios. Esa fe demostrada en genuino arrepentimiento, es lo que hace que Jesús nos pondere por encima de cualquier religioso o práctica religiosa al decir:

“Os digo que este descendió a su casa justificado antes que el otro, porque cualquiera que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido»” (v. 14).

Al parecer a Jesús le gusta “voltearnos la cara” acerca de cómo nos vemos nosotros mismos y nuestros humanos conceptos preconcebidos de justicia y derechos. Justificado aquí se traduce como perdonado y reconciliado con Dios. Jesús concluye con esta frase célebre, pero que tanto me cuesta practicar: “El que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido”.

sábado, 13 de marzo de 2010

FIESTA Y GOZO: PARÁBOLA DEL HIJO PRODIGO

La última parábola en este capítulo de Lucas (Lc 15.11-24) ha sido llamada la «reina de las parábolas». Muchos la han clasificado como el “cuento breve” (short story) más antiguo de la literatura universal. Tiene todos los elementos necesarios para la composición de una historia impactante que permita una multiplicidad de lecturas congruentes.

Dentro del discurso narrativo, este último cuadro es el punto culminante en que Jesús claramente analiza el problema fundamental de los líderes religiosos. La referencia a la paternidad divina se encuentra en el Antiguo Testamento en Os 11; Jer 31.18-20; Sal 103.13.

Aquí, Jesús pinta un cuadro muy descriptivo y emotivo de la relación entre el padre y sus dos hijos. Es obvio que el hijo menor alude a personas como «los cobradores de impuestos y la gente de mala fama», y el hijo mayor a gente como «los fariseos y los escribas».

El relato tiene dos partes: la primera es el alejamiento, arrepentimiento y regreso del hijo menor; la segunda, la reacción del hijo mayor.

En la primera parte encontramos la narración del derroche de los bienes y la caída al nivel más bajo que un judío podía imaginarse: ser apacentador de cerdos. Tomemos nota de que el cerdo era un animal impuro y que el joven, de pura necesidad, tiene que tomar un puesto inferior al nivel que los jornaleros en su tierra natal tenían. En tierra extraña, lejos de su familia, él se ha unido con un pagano que lo trata como muchos tratan a los extranjeros, explotándolo; y, además, padecía hambre.

Es interesante ver que, en el v. 13, leemos que se alejó físicamente de la comunión con su familia (se fue de viaje, a una región lejana); en el v. 15 el texto griego dice literalmente que “él fue a unirse con unos de los ciudadanos de aquella región”. El verbo griego kallaomai es muy fuerte y aquí se refiere a una relación de trabajo. Dios habla hoy y muchas otras traducciones modernas, correctamente interpretan que en este contexto se trata de «pedir o buscar trabajo».

Pero aquí hay un elemento de ironía. El joven se aleja de su padre que lo quiere y termina buscando trabajo, para unirse con un extranjero que lo detesta tanto como para enviarlo a apacentar cerdos, sin darle suficiente comida a cambio de su trabajo. La Biblia del peregrino nos da una excelente traducción: «Fue y se comprometió con un hacendado del país…» El que huyó del «compromiso» (la unión) con los suyos, ahora se ve obligado a comprometerse (unirse) con los que no son los suyos.

En todo caso, el joven recapacita y, en un monólogo interior, practica cómo regresar a su padre: «Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.» El «cielo» acá se refiere claramente a Dios. Para evitar decir el nombre de Dios o la palabra «Dios», los judíos muchas veces usaban «cielo». Por ejemplo, el «reino de los cielos» es sinónimo de «reino de Dios».

El joven ha pecado contra Dios y su padre; ahora está dispuesto a tomar aun la posición más baja de jornalero porque su amarga experiencia le ha mostrado que hay posiciones de un nivel aun inferior a esta. De un alejamiento físico y psicológico pasa a un acercamiento psicológico que culminará con el regreso físico a la casa paterna. Este regreso, este acercamiento, se define en la parábola como un regreso a la vida misma —«este mi hijo muerto era y ahora ha revivido»—, una resurrección de un estado de alienación moral, espiritual y social.

Pero hay una gran sorpresa en la narración: el padre es quien se acerca a él y corre a recibirlo. El padre viola las reglas sociales de su comunidad; en vez de esperar a que el menor (y, en este caso, el menor rebelde) le muestre reverencia, él sale a saludarlo. No hay recriminación alguna.

El hijo que no merece ser hijo y que ya no quiere ser hijo, recibe del padre el anillo del sello de la casa, que representaba la autoridad del padre. Recibe asimismo el mejor vestido (o, como también podría traducirse el griego stolên tên protên, «el vestido que tenía anteriormente», o sea, antes de abandonar la casa paterna). Recibe calzado; los esclavos no llevaban calzado, y los huéspedes se los quitaban cuando estaban en casa del anfitrión.

Anillo, vestido y calzado forman un conjunto de símbolos de un hijo legítimo de la casa. Esta parte también termina con el tema del gozo que, como ya vimos, es típico del evangelio de Lucas. El becerro gordo se comía en ocasiones especiales o durante visitas de personas importantes. El padre hace un llamado para festejar y gozarse. Al igual que todas las parábolas anteriores de este capítulo el perdón y la redención del ser humano siempre termina en FIESTA Y GOZO.

jueves, 11 de marzo de 2010

ME QUEJE, SIN RAZÓN DE LA VIDA

Pensaba que mi vida no estaba bien. Sentía que algo siempre me faltaba.

Entonces hablé con Dios.

- Me quejé de lo que me salió mal en el trabajo, pero no agradecí por las manos que tengo para trabajar.

- Me quejé de tener que soportar el ruido de mis hermanos, mas no agradecí por tener una familia.

- Me quejé cuando no había lo que más me gustaba para comer, pero olvidé agradecer por tener qué comer.

- Me quejé por mi salario, cuando miles ni siquiera tienen uno.

- Me quejé porque no apagaban la luz de mi cuarto al salir, pero no pensé en que muchos no tienen hogar donde tener alguna luz encendida.

- Me quejé por no poder dormir un poquito más, olvidando a quienes darían todo por tener su cuerpo sano para poder levantarse.

- Me quejé porque mi madre me reprendía, cuando millones desearían tenerla viva para poder honrarla y abrazarla.

- Me quejé porque no tenía tiempo, cuando me solicitaron dar una charla sobre Jesús, olvidando el privilegio que es poder hablar a otros de su amor.
Dios me iluminó en esa conversación y entonces comprendí mi egoísmo y lo ingrato que he sido con Él. Fue cuando entonces comencé a agradecerle por las cosas que había olvidado, y aún más de aquéllas por las que tanto me quejaba.

Recuerda este proverbio:
‘Pobre del que, al final del día, no sabe a quién agradecer’.

¡Que Dios bendiga tu día!

miércoles, 10 de marzo de 2010

OTRA SOCIEDAD ES POSIBLE (CAMPAMENTO ESPERANZA)

SENSIBILIZACIÓN DE LA SOCIEDAD Y VOLUNTARIADO PARA LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE CAMPAMENTO ESPERANZA:
En este gran país existe un paraíso donde hay sol, arena, mar, paisajes hermosos, pero sobre todo un lugar donde los seres humanos aprendemos a ser más semejantes a Jesús, un lugar en donde todos los ideales se cumplen, un lugar que te deja ver implícito el mensaje de Dios: HAY ESPERANZA. Acompáñanos en esta gran aventura y recorramos juntos el camino y observemos lo que está pasando.

Obedeciendo el llamado de Dios de ministrar las necesidades del prójimo, desde hace años la Iglesia Bautista La Boca desarrolla dos veces cada año, CAMPAMENTO ESPERANZA, ministerio inclusivo de la Iglesia.

Por definición, para nosotros el término “Incluir” tiene que ver con la naturaleza misma de la Iglesia y su Misión de atender a los que la propia sociedad trata como excluidos.

Las personas con discapacidad forman parte de ese grupo especial de la sociedad a quien debemos dar toda nuestra atención y amor.

No tenemos ninguna razón, primeramente como seres humanos, ni mucho menos como cristianos que viven su fe, para negarles a las personas con discapacidad lo que Dios mismo nunca les ha negado.

Como Jesús lo hizo nosotros nos sentimos más que motivados y hacemos su obra, él es nuestro modelo, a él debemos seguir. Campamento Esperanza es un ministerio inspirador que provee recursos espirituales a campistas, voluntarios y colaboradores.

En estos tiempos, el proceso formativo de nuestros jóvenes no puede estar limitado al aula de clase, pensar en esto sería una formación académica exclusiva al conocimiento-intelecto.

Nuestro ministerio ofrece una formación inclusiva y resalta los valores y principios como parte de la formación del carácter.

Dos cosas importantes que impacta a la sociedad, que es visible y permanente, y que hace único el trabajo que realizamos: sensibilizamos a la sociedad y ofrecemos a esta ser participe en el voluntariado para la discapacidad.

Esta experiencia en constante desarrollo nos permite crear junto a las instituciones educativas, un concepto único en cuanto a la inclusión de las personas con discapacidad, en relación a la sociedad a la cual servimos.

Luego entonces, el amor de Dios se hace evidente, somos sus ojos, sus manos, su cuerpo y empezamos este ministerio de amor para y con las personas con discapacidad. Son tan capaces que, con ellos mismos empezamos otra faceta de rescatar a nuestros adolescentes que se están perdiendo y enseñarles que otra sociedad es posible.